La novela de amor entre Ana y Pedro no era solo una historia de
encuentros y despedidas, sino una narrativa de crecimiento, adap-
tación y la fortaleza que encuentra el amor cuando se enfrenta a los
desafíos. A medida que cerraban el capítulo de la novela, Ana y Pe-
dro miraron hacia el futuro con la certeza de que, juntos, podrían
enfrentar cualquier página que les deparara la vida.
El último capítulo de su historia de amor estaba lejos de ser el fi nal;
más bien, era el inicio de un viaje que compartirían, con cada día
como una nueva página por escribir en su libro de vida conjunto.
Ana y Pedro, instalados en su piso, miraron el horizonte lleno de
posibilidades, listos para escribir sus propios destinos con el amor
como su guía eterna.