El texto nos muestra una semblanza de España y la Comunidad Autónoma de Cataluña desde los pilares que representan la Lengua, la Literatura y la Historia, que clases dirigentes, políticas, intelectuales, empresariales, comunicadores sociales y representantes de la congregación religiosa católica en Cataluña obvian, inoculando a los españoles de la Comunidad Autónoma su desafección a España con fines independentistas, negándoles el empleo de la lengua castellana o española. Brinda una perspectiva de los vínculos de Cataluña como condado, reino o principado con la Corona de Aragón; la Corona de Castilla y Aragón y el reino de España; así como de las actitudes de élites dirigentes catalanas que no cesan en el curso de la historia de plantear al Estado afrentas separatistas. El autor hace un análisis crítico al comportamiento de dirigentes políticos de ámbito nacional durante el período democrático que han mantenido —y prosiguen en su empeño— actitudes y acciones de tolerancia y hasta de connivencia con esas proclamas con pretensiones de quebrar la cohesión territorial de la bimilenaria nación española.