El agente especial Christopher Arratia y su equipo se enfrascan en una investigación contrarreloj, donde cada día que pasa es una sentencia mortal para un desafortunado. Durante cuatro años consecutivos, un asesino implacable, de mente distorsionada, ha atacado siempre en la misma fecha, sin dejar un solo rastro o indicio de su identidad o próximo movimiento. Tras una pérdida, el caso se tornará personal para Arratia.
Una paradoja psicológica se hace presente.
