Un joven doctor acaba de abrir una pequeña consulta en una ciudad rural del sur de Inglaterra. Ilusionado, espera la llegada de su primer paciente. Van pasando los días, pero no llega ninguno. Hasta que, una noche, su ayudante, abandonando momentáneamente su afición por los caramelos de menta, le comunica que hay una dama esperando a poder hablar con él en su consulta. Emocionado ante su primer paciente, el médico recibe a la señora, a la que apenas puede distinguir, como consecuencia de un velo negro que le tapa casi completamente el rostro. Finalmente, y después de algún llanto, le dice que está allí no por ella, sino por alguien que está a punto de morir y que necesita la ayuda del doctor.
Opiniones
ver todo (1)Todas las opiniones vienen de usuarios registrados que han adquirido nuestro servicio o producto.
Las opiniones quedan registradas, pasan por un proceso de verificación y se publican de acuerdo con nuestra política de Términos & Condiciones.
Recomendados