Este audiolibro nos presenta los cantes flamencos que en 1881 recopiló el padre de los hermanos Machado, Antonio Machado Álvarez. La cultura universal está en deuda con este abogado, intelectual y profesor de la Institución Libre de Enseñanza, que evitó en su día la pérdida de un tesoro oral que se habría desvanecido sin su trabajo. Al igual que la fuente de los Albarizones que ilustra la portada de este audiolibro, vive hoy en el olvido, sin nada que nos recuerde que allí fue aguador el primer cantaor flamenco conocido, el gitano tío Luis el de la Juliana, este libro no ha sido lo suficientemente difundido, cuando nos acerca a las letras del más puro cante y a la esencia del folk-lore, como escribia su autor a finales del XIX.
Este audiolibro es narrado con el acento ibérico.